Hace unos años, Megan Fox era sin duda la mujer del momento. Ocupaba la mayoría de portadas, lideraba todos los rankings de las mujeres más atractivas del mundo, y estábamos atentos a cada nueva película que protagonizaba para ver qué nuevas escenas de lo más calientes nos aportaban.
Pero al quedarse embarazada se quedó en un segundo plano que ahora, ya convertida en todo un ejemplo de MILF, le cuesta recuperar. Lo intenta a través de películas como This is 40 o de reportajes como el de Esquire del pasado mes de febrero, pero su caché ya no es el mismo.
Y eso que sigue siendo una auténtica diosa, como demuestra en estas fotos en lencería que ha protagonizado para una campaña publicitaria de Sharper Image, pero ya no se para el mundo cuando nos otorga nuevo material. Quizás debería dedicarnos un buen topless para volver a ser la número uno.


